lunes, 16 de noviembre de 2009

VACUNACION SI? NO? YA VEREMOS...

Es el día, no se ha informado bien a la ciudadanía, y encima la mayoría de los implicados tienen una gran desconfianza a vacunarse, y eso que uno de los colectivos implicados es el colectivo sanitario.
Me llegan comentarios de personas que han estado en urgencias de algunos CAP y Hospitales, y ven a mucha gente con máscara, llegas con fiebre y si no eres colectivo de riesgo no te dicen si tu gripe es A,B,C,D, E o Z, dicho por una persona que llevó su hijo a urgencias con 39,5 de fiebre.
La verdad es que ante tanto desconocimiento, tanta desconfianza, que hacer??.
Yo como siempre digo, dejarse recomendar por los que saben de la materia.

N O T I C I A.

Ha llegado el día. El lunes comienza en toda España la campaña de vacunación frente al virus A/H1N1 causante de la nueva gripe con la que se prevé inmunizar a entre un 15% y un 20% de la población. En concreto, a todos aquellos considerados como grupos de riesgo por el Ministerio de Sanidad y Política Social y las comunidades autónomas: mujeres embarazadas, enfermos crónicos mayores de seis meses de edad, trabajadores sociosanitarios y personal de los servicios públicos esenciales (Fuerzas y cuerpos de Seguridad del Estado, bomberos y personal de Protección Civil e instituciones penitenciarias).

Actualmente, más del 97% de los cuadros gripales detectados en España están provocados por este nuevo virus, que desde que se detectaran los primeros casos en el mes de abril ya ha provocado 88 fallecimientos en nuestro país. Además, la tasa de nuevos contagios sigue aumentando y en la última semana fue de 327,92 casos por cada 100.000 habitantes, después de haber detectado 145.113 nuevas infecciones.

En principio está previsto que la campaña de vacunación dure un mes o mes y medio aunque se prorrogará "según las necesidades", y se realizará "de forma simultánea" para todos los grupos de riesgo de todas las comunidades. La organización de estas campañas ha quedado en manos de cada una de las autonomías y serán los médicos y enfermeras de los centros de salud los encargados de resolver las dudas de la población y de decidir, analizando cada caso, si un paciente fuera de los grupos de riesgo necesita recibir la vacuna.

Los primeros en recibir el pinchazo
Entre dichos grupos de riesgo se encuentran los ciudadanos con patologías crónicas de tipo cardiovascular (excluyendo la hipertensión); respiratorio (incluyendo displasia bronco-pulmonar, fibrosis quística y asma moderada-grave persistente); diabetes mellitus tipo I y tipo II con tratamiento farmacológico; insuficiencia renal moderada-grave; hemoglobinopatías y anemias moderadas-graves, y asplenia.

Del mismo modo, también deberán vacunarse aquellos ciudadanos que presenten obesidad mórbida (con un índice de masa corporal igual o superior a 40); enfermos hepáticos crónicos en estado avanzado; enfermos neuromusculares graves; pacientes con inmunosupresión (incluida la originada por la infección por VIH o por fármacos o en los receptores de trasplantes); y niños y adolescentes, menores de 18 años, que reciben tratamiento prolongado con ácido acetilsalicílico, por la posibilidad de desarrollar un síndrome de Reye.

Dentro del personal sociosanitario se incluye tanto a los trabajadores de los centros sanitarios, de Atención Primaria y hospitalaria, pública y privada; como al personal empleado en residencias de la tercera edad y en centros de atención a enfermos crónicos que tengan contacto continúo con personas vulnerables.

Tres vacunas diferentes
Para todas estas vacunaciones, el Gobierno ha comprado más de 37 millones de vacunas pertenecientes a tres laboratorios farmacéuticos (22 millones de dosis de 'Focetria', de Novartis; 14,7 millones de 'Pandemrix', de GlaxoSmithKline y 400.000 de 'Panenza', de Sanofi Pasteur) con las que se podría vacunar hasta un 60% de la población, aunque para proteger a los citados grupos de riesgo sólo se necesitarán 10 millones de dosis.

En el caso de las embarazadas, la vacunación podría retrasarse unos días, según ha reconocido la titular del ramo, Trinidad Jiménez, ya que la vacuna que se les debe administrar a este grupo de riesgo, 'Panenza', todavía no está aprobada por las autoridades europeas y españolas del medicamento. Según explicó la ministra, esta terapia "aporta un plus de seguridad" ya que no tiene adyuvante (una sustancia que potencia la respuesta inmune) pero, para aquellas que no quieran esperar "pueden usar las otras dos vacunas", que son también "seguras y eficaces" para las gestantes.

La vacuna de Novartis, 'Focetria', está preferentemente indicada en personas menores de 17 años y mayores de 60 años, mientras que para el resto de población se recomienda el uso de 'Pandemrix'. En cuanto al número de dosis, será suficiente con un único pinchazo por persona salvo en los niños de entre seis meses y dos años, quienes "probablemente necesitarán dos dosis", según la ministra.

Los cerca de 37 millones de dosis de vacuna compradas por el Gobierno y que no sea necesario utilizar irán, bien destinadas al canal privado para ser adquiridas con receta médica en las oficinas de farmacia -algo que podría ocurrir "a finales de diciembre principios de enero, aunque no es definitivo"-, bien se guardarán para la vacunación del próximo año o se enviarán a países pobres en el marco de la Iniciativa Obama, que apuesta por donar a estas zonas las vacunas sobrantes del primer mundo.

1 comentario:

Espidifen dijo...

Tot tendeix a la dualització, com ja apuntaven fa milers d'anys els filòsofs asiàtics.
La gent és del Barça o del Madrid, de dretes com tu o d'esquerres, del mar o de la muntanya, de cinema comercial o alternatiu, de Sega o de Nintendo.
El mateix passa amb això de la grip A, i tothom ha corregut a agafar posicions, a saber: els uns a favor de la vacuna i els altres en contra. El que pensi jo a ben poca gent li ha d'importar perquè de medicina no en tinc ni idea, però el més alarmant és que els metges estiguin tan dividits. La vacuna pot ser bona o pot ser dolenta, o en tot cas bona en alguns casos i dolenta en d'altres. Però això quasi ningú ho diu.
Que no era una ciència, la medicina? Aquests darrers dies em recorda una discussió entre sofistes, on els arguments esdevenen armes llencívoles. Avui surt una monja doctora en medicina i diu que no, i l'endemà el director d'un hospital diu que sí (la Teresa Forcades, val a dir-ho, com a mínim es molesta a defensar el seu no amb arguments mèdics, cosa que no fan d'altres professionals, un gest que trobo enormement irresponsable). Uns diuen que tot plegat és una conspiració de les indústries farmacèutiques, i d'altres que si l'han donada massivament als EUA, el país de les demandes mèdiques, no cal patir.
Jo, si tinc mal de cap, prenc un Espidifen. Funciona. Si tinc molt mal de cap, un i mig o dos. A la llarga fa mal però tampoc n'abuso tant, i estic segur que tots els metges diran una cosa similar. Per què, doncs, amb la vacuna hi ha tanta polèmica? Funciona o no? Acabarem pensant que els metges no saben el que diuen, i això sí que em crearia molta angoixa. Perquè si no em puc fiar del sí o del no d'un metge en aquests temes... de qui em puc fiar?
La situació em recorda massa un capítol de House. Una parella de joves van a veure'l perquè tenen el fill malalt i en House li recepta antibiòtics. La parella diu que no pensen donar-li antibiòtics al nen perquè tot forma part d'una conspiració de les indústries farmacèutiques per fer diners, i que de cap manera pensen col•laborar-hi.
Com vulguin - els respon en House.- Així col•laboraran amb les indústries que fabriquen taüts. M'han dit que en fan de molt bonics.
Hi ha temes en els que la monocromia avorreix, i es necessita un "rival", una opinió contrària (futbol, política, quina cervesa és la millor del món, Pepsi o Coca cola)...
Però el collons de món en el que vivim s'està acostumant a que qualsevol decisió, sigui la que sigui, ha de tenir els seus defensors i els seus detractors, a parts iguals.
com sempre, t'apunten amb el dit i et miren d'una manera inquisidora, preguntan-te sempre tu a quin bàndol estàs? I això ens està tornant imbècils, així de clar.