DE JONG vs EVO MORALES

Vimos en el pasado mundial de sudafrica, como un jugador holandes de nombre de jong, realizaba una patada voladora, al más puro estilo Jet Li, a Xabi Alonso, y solo vió la tarjeta amarilla, pués este fin de semana ni corto ni perezoso le parte la tibia y el perone al jugador Ben Arfa del Newcastle, viendo la entrada se ve claramente la exagerada malintención que hay por parte del jugador holandés que se ha podido cargar la carrera del futbolista Ben Arfa.
Pués bien, en Holanda han vetado su participación en la selección para quitarse el sanbenito de jugadores extremadamente violentos, y por contra su club el Manchester City le sube el sueldo aprovechando su momento mediatico.
A todo esto nos llegan las imágenes del rodillazo a los genitales en un partido de futbol del número 10 y no es Maradona, sino Evo Morales dando una lastimosa imagen de lo que ya sabíamos mucho del ínclito personaje.
Dejo la noticia.

El pasado domingo el presidente de Bolivia, Evo Morales se encontraba inaugurando el césped sintético de una cancha en la capital boliviana.
Tras este acto se disputó lo que en principio iba a ser un partido amistoso entre el equipo de Palacio de Gobierno y el de la Alcaldía de La Paz (formado por la oposición).
Durante el encuentro, Daniel Cartagena, uno de los jugadores del conjunto contrario al de Evo Morales, dio una patada al presidente en la pierna, lo que provocó la airada reacción de Morales que pegó un rodillazo en el bajo vientre al infractor.
En principio, el árbitro no vio la agresión de Evo Morales a Daniel Cartagena puesto que el juego se encontraba parado por la expulsión de dos jugadores, uno de cada equipo.
La Policía e incluso el alcalde Luis Revilla tuvieron que entrar en el campo para calmar el caldeado ambiente que podría desembocar en una pelea entre ambos equipos.
El funcionario que agredió al jefe del Ejecutivo boliviano fue expulsado, mientras que Evo siguió jugando al fútbol pese a su lesión de la que tuvo que ser atendido nada más terminar el partido.
Cartagena aseguro que no tuvo mala intención y que el suceso se debió al calor de un partido que terminó 4-4 y que dejó bien clara la fuerte rivalidad que existe entre el gobierno central y el municipal.

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